viernes, 13 de agosto de 2010

VIDA-VIVIR

Dedicado a Mayte,

el amor de mi vida

Melanie y Ángela

la mejores amigas del mundo

y a Fiona

quien me hizo recordar

la verdad




Hacía mucho tiempo que mis dedos no se deslizaban por mi teclado permitiéndome expresarme, dejándome olvidar e impulsándome a continuar a pesar de todo. Pero a diferencia de las veces anteriores… esta, no sé qué escribir, ni cuál es la necesidad que me impulsa a intentar explicar algo que ni yo mismo entiendo.

Por momentos me gustaría poder entender el significado de la vida y en donde entran a tallar las relaciones afectivas de todo nivel (compañerismo, amistad, cariño, amor, familia) en esta misma… Estoy completamente convencido de que son fenómenos que no pueden esclarecerse por separado ni que son las únicas variantes de la ecuación, pues también hay que considerar el bien común, la realización personal, el confort económico, la actividad sexual, los momentos de ocio, el trabajo, los estudios, la tecnología, la comunicación, la reciprocidad y la ética y la moral y los valores bajo los cuales se organiza el mundo en el que “vivimos”.

Es así como encuentro uno de mis primeros inconvenientes… pues vivir (que es todo lo descrito en el párrafo anterior por convención social) y vida (que es un fenómeno completamente diferente) se ven adscritos a una región geográfica determinada, a una sociedad establecida, a parámetros estructurados y por lo tanto, su significado se vuelve tan vasto como el mismo diccionario de la RAE en su última edición.

Entonces se vuelve lexicalmente imposible definir vida y definir vivir, al menos a mí se me hace complicado, es aquí donde encuentro otra limitante y otro problema, que el vocabulario humano, también se ve subyugado a una sociedad, a una región, a una cultura y a sus valores y cada vocabulario, cada idioma, tiene una forma diferente de definir sus palabras y su norma y su código, son lo que sus usuarios necesitan para poder expresarse.

Evidentemente el tipo de definición que intento encontrar no es lexical, pues el lenguaje ya de por sí es limitante e imposibilita la correcta estructuración de los significados abstractos, por lo tanto, realmente tengo ya dos trabas, mi incapacidad de poder entender lo que es el fenómeno de la vida y el acto de vivirla y lo imposible que resulta poder plasmarlo en palabras.

Si a esto le agregamos lo efímero que parece ser el tiempo de “vida” y lo poco que realmente podemos “vivir”, yo estaría inútilmente perdiendo mi tiempo en tratar de entender algo que ni siquiera sé si me va a ayudar a entenderme, que es mi principal preocupación.

Lo único que sé en este momento es que me encuentro deprimido por una serie de eventos que se han suscitado dentro de mi “vida” al intentar “vivir”… y es esta soledad y este desamparo al cual yo mismo me he sometido, y al cual solo tienen acceso mi enamorada y tres amigas más, la que me impulsa a preguntar cuál es el porqué de todo esto…

Solo estoy completamente convencido de una cosa…

NADA VA A VOLVER A SER COMO ANTES.